jueves, 14 de junio de 2012

Mantener el equilibrio

Los primeros días en Vietnam, en Hanoi, observaba a la gente en moto y pensaba si yo sería alguna vez capaz de mantener el equilibrio. Experiencias anteriores me habían enseñado que justamente mi relación con las motos era muy frágil en ese aspecto.

Meses después (hey…no tantos), esta reflexión, que me encuentra salvajemente aferrada a la vida, me resulta simpática y extraña. Sobretodo esto último porque ya no es una cuestión de equilibrio con la moto, el miedo no forma parte de esa realidad, y es como si nunca esas dudas hubieran estado siquiera allí.

Así que me pregunto, cómo lo hice? ¿Porqué no trasladar este mismo tipo de sabiduría hacia otros aspectos y situaciones de mi vida?

Entiendo que solo se debe plantar una idea o actitud positiva para erradicar comportamientos negativos y miedos.

(And then leave behind a little of your shit…each time, and that´s charity for everybody!)

Una amiga me ha repetido constantemente estos últimos meses “confianza valiente” (y antes de que digan algo, no, nada tiene que ver con Soledad Silveyra, etc..).

Y me pregunto, me ha hecho efecto su trabajo diario? Porque créanme, lo ha hecho a modo de terapia conmigo.

No puedo decir que me considero valiente, ni que la confianza en mí ha crecido, pero de alguna manera algunos miedos han reducido su tamaño. Me permito sin embargo ser yo misma, gruñona a veces, muy, pero muy naif otras. Un pequeño lobo solitario que entiende la necesidad de la manada, y allí busca refugio. Dejar de jugar en contra, o pensar en contra de mí reprimiendo.

Si lo que sale es bueno o no….no importa.

Tuve de hecho la oportunidad de observarme desde una situación “border”. No me gustó lo que ví. Pero entendí. Aprendí.

No hay punto alguno en describir la situación (generalmente es cuando una situación nos sobrepasa…él dice…ella dice… y jamás nunca nosotros decimos o hacemos…sino uno contra el otro, no con el otro… !), pero el resultado fue que al sentirme miserable recurrí a buscar refugio en una idea de seguridad que tenía, y ello implicó, entre otras cosas, recordar mi historia, como si hechos pasados, glorias o no, me devolverían algo de lo que yo creía que había perdido.

Verme en ese espejo no me produjo el efecto deseado en ese momento, y por suerte, porque si bien no todo está bien ahora, es auténtico. Más claro. Inclusive a la hora de la búsqueda de trabajo (lo cual sigo haciendo…Kenya? No, quizás Ecuador en Enero…sí,  me gustaría…… hay una oportunidad de voluntariado en Afganistán…mmmm)

La máscara no tiene nada más que hacer conmigo y entendí que, en mi caso cuando miserable, cuando nostálgica, busco cierta seguridad y certeza en el pasado. Y ello me disgusta aún más. Sobretodo por la idea que transmito.

Vuestra y "mía" terapia me ha ayudado a desarrollar me muestra un mundo de posibilidades. Que me aterroriza, sobretodo porque hoy por hoy, no puedo moverme mas allá de Vietnam. Pero es solo una moto.

Y hoy quiero honrarte, diciéndote lo mismo. Escribiéndote. Gracias por mostrarme a Palermo.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario